Finiquitado el mes de marzo, hemos podido
asistir a numerosas iniciativas vinculadas a lo que se ha dado en denominar el
empoderamiento de las mujeres. Propuestas parlamentarias, debates
protagonizados por las mujeres, multitudinarias manifestaciones y
concentraciones en las calles, acciones culturales, sociales y deportivas….
Sin embargo, y sin ánimo de ser
reiterativo, quisiera insistir en el enorme paso adelante que hemos dado en
Extremadura. El símbolo ( uno más) se pudo visualizar en la pasada celebración
del Cerezo en Flor en Cabrero, localidad
del Valle del Jerte. Acogía en esta
ocasión, el pistoletazo de salida de unos días de fiesta en comunión con una
naturaleza en expectativa de esplendor.
Allí, su alcaldesa, Mari Fe, rodeada de
la Presidenta de la Asamblea, Blanca Martín, de la Presidenta de la Diputación,
Rosario Cordero y de las tres Consejeras del Gobierno Regional: Esther
Gutiérrez, Begoña García y Leire Iglesias, mostraban lo que, nadie duda en
señalar, como la trascendental presencia femenina en la punta de lanza de la
política y la vida pública extremeña.
Al otro lado del océano Atlántico, en
Argentina, las entrañables abuelas de mayo, marchaban de la mano de un grupo de
chicas, hijas de padres represores de la última Dictadura en ese país, que
repudian lo que hicieron sus padres. Un auténtico gesto de valentía y un
elemento más de cómo la visibilidad de estas talentosas mujeres dejan de un
lado el papel de permanencia en la sombra.
Por último, queda recordar lo mucho por
recorrer y reivindicar. Al margen de la necesaria inclusión en los puestos
directivos de las grandes empresas, no está de menos reseñar, que si ya son más
de la mitad de las alumnas en las clases, más
de la mitad en la mayoría de los Claustros de profesores y una parte muy
significativa de los órganos de dirección, una sociedad bienquedista, que
pierda sus complejos, debería impulsar la candidatura de más mujeres a los
rectorados de más Universidades españolas.
No es menos cierto, que forman parte de una
imprescindible incorporación en los equipos, pero queda el reto de conquistar,
en igualdad de condiciones que sus compañeros masculinos, los principales
órganos de decisión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario