domingo, 30 de julio de 2023

EL CAMBIO

El otro día escuchaba que la mayoría de los partidos y algunos de sus principales líderes cambiaban de opinión con frecuencia. Si esto fuese verdad, ¿en qué se va a basar la ciudadanía para creer lo que nos digan o nos propongan sus dirigentes? Al final va a ser cierta aquella fábula de “ que viene el lobo…”. De momento, lo que podemos comprobar en Extremadura con respecto a los cambios políticos es el ninguneo a la extrema derecha. Sus políticas más polémicas, dañinas y conflictivas están siendo silenciadas: las primeras votaciones en torno a cuestiones como la igualdad o la cultura consiguen el apoyo de todos los grupos, excepto de VOX. Al menos un mínimo de esperanza. Sigamos expectantes. Otro tipo de cambios, mucho más importantes, son los estructurales. Sin embargo, esperemos, ya no estamos en aquellos incipientes años de la transición a la democracia donde, por ejemplo, tuvo mucho éxito el eslogan electoral del PSOE “ Por el cambio”. Se trataba, entonces, como se demostró en la siguiente década, de dejar atrás el abandono, con respecto a la situación de los países de nuestro entorno, al que estaba sometido España. Se modernizó el país, entramos en Europa, se desarrollaron las autonomías regionales, se acometieron trascendentales reformas que beneficiaron en distintos niveles a cada uno de los territorios…. Eso sí, todavía hoy continúan desde los ámbitos más reaccionarios con las quejas sobre lo mal que estamos: que si no se ha hecho nada, que si estamos en los últimos puestos de todos los rankings… no les gusta reconocer los enormes avances de los últimos años. La revolución que ha supuesto para nuestra tierra, la transformación completa de Extremadura: desde la universalización de la educación o la sanidad (con la construcción de numerosos colegios, institutos, hospitales y centros de salud) hasta la generalización de infraestructuras básicas deportivas y culturales de las que carecíamos, la atención pública a la dependencia, la extensión y mejora carreteras y autovías… Evidentemente queda mucho por hacer. Pero ya no estamos tan lejos de los que nos preceden. Salvo que lo que pretendan los nuevos gobernantes extremeños es que el cambio sea el retroceso. Por todas estas razones y parafraseando a aquellos que dicen que Extremadura ha hablado, les decimos: en efecto, Extremadura ha hablado el 23 de julio, y una vez más ha dicho que no quiere ni a la derecha ni a la extrema derecha. Y mucho menos juntos.

lunes, 24 de julio de 2023

CONSTRUIR O DERRIBAR

Esta semana se ha iniciado una nueva etapa política en la Junta de Extremadura. Si conseguimos hacer realidad las intenciones manifestadas por la nueva Presidenta, se trata de construir y no derribar. Esto, en principio, muy plausible, no cuadra con muchos de los elementos recogidos en el acuerdo que han firmado con la extrema derecha ( salvo que sea solo una manera más de ir saliendo del paso). No se puede obviar que dentro de los puntos que lo han hecho posible hay lo que coloquialmente conocemos como “ letra pequeña”. Viene además, aderezada, sin lugar a dudas, con mucha ideología desde la cual la oposición tiene el derecho y la obligación de poder trabajar para tratar de contrarrestar sus mensajes. Hay muchos ejemplos que nos pueden hacer dudar. Por poner sólo un caso, llama mucho la atención la apelación de María Guardiola a que en la Cultura debe prevalecer la libertad. Debe incomodar. Y lo dice, justo en la semana en la que lo que han prevalecido han sido las censuras de sus nuevos gobiernos. Esperemos que, esta vez sí sea cierto lo que dice. No quisiera que en Extremadura se le tuviera miedo a la Cultura. Que en un patético escenario podamos ver también en nuestra tierra cancelaciones de obras de teatro, suspensiones de exposiciones, prohibiciones de conciertos… Ese diálogo, consenso y esperanza que tantas veces ha reiterado solo se puede llevar a cabo con certezas. No se trata de dar lecciones ( en ese aspecto se suelen arrogar prioridades morales o presuntos principios de autenticidad). Para eso, cierto es, que hay que dar tiempo. Como se dice ahora, esto va de hechos: el mantenimiento de los derechos se ve principalmente en los Presupuestos. El resto son sólo palabras, con lo que este concepto para algunos viene a representar en las últimas semanas. Hay que esperar acontecimientos Dejar que las promesas se conviertan en actuaciones. Juzgar sobre lo realizado. Por último, quiero dejar claro que en España, como en Extremadura, tenemos un modelo parlamentario por el que no se elige al Presidente/a sino a los diputados de los partidos que votarán a quien pueda formar gobierno. Ya sean solos o en alianzas entre varios grupos políticos. Lo digo, porque una crítica a los pactos solo puede hacerse desde el cuestionamiento hacia lo que van a representar las políticas que se lleven a cabo o desde el alejamiento a los principios ideológicos de algunas de las partes. Nunca dudaremos de su legitimidad. Por parte de la oposición, como señalaba el escritor Alejandro Dumas: “ en política cuando se tiene el viento de cara, se bordea”.

domingo, 16 de julio de 2023

EXTRAÑARSE

Al margen de los argumentos que dábamos la semana pasada sobre la relación entre la palaba dada y la credibilidad de lo que propongas en un futuro, no acabo de entender por qué se extraña tanto la gente del pacto en Extremadura entre el PP y VOX. Si como hasta ellos mismos indican que buena parte de los votantes de VOX vienen del PP. Si buena parte de los dirigentes de la extrema derecha, junto con sus candidatos, también vienen del PP. Si analizando el acuerdo programático tienen muchos más puntos de encuentro que de desencuentro. Entonces, ¿ por qué nos sorprende que hayan llegado a un acuerdo? Si, en conclusión y ahora, en la práctica, son lo mismo. Cosa muy distinta, es que se utilicen sus debilidades, hablando en términos políticos, sus mentiras, para señalar las incoherencias. Tendremos que recordarles sus principios cada vez que, por ejemplo, su gobierno deshumanice a los inmigrantes, no condene la violencia machista o esconda la bandera LGTBI. Pero lo que está claro, aunque parezca una contradicción, es que mucha gente piensa como ellos. Y también es cierto, que mucha gente, no piensa como ellos. Cabe preguntarse ¿por qué los extremeños somos diferentes en el trato entre las derechas?. ¿Por qué hay mayor autonomía de Madrid en un sitio que en otro? Han conseguido trazar una mayoría parlamentaria que les otorga el derecho a gobernar. Tienen que tener todo el respeto de los que creemos en la Democracia. Soy de los que considero correcto, desde la libertad de expresión, argumentar todo aquello que me parece que va en contra de los valores que he ido construyendo a lo largo de toda mi vida Del mismo modo, entiendo que una vez producida la investidura de la Presidencia del Gobierno de la Junta de Extremadura y una vez que se nombre el Gobierno que le va a acompañar, lo que toca es analizar, con elementos en los que apoyarse, la compañía y las políticas que se lleven a cabo. Serán momentos en los que, como se relataba sobre Alfonso XII, podamos aseverar, en este caso sobre María Guardiola, ¿ dónde vas triste de ti?

domingo, 9 de julio de 2023

LA PALABRA

Durante los años que he sido diputado en la Asamblea de Extremadura he escuchado, en multitud de ocasiones, que nos hallábamos ante el denominado “ templo de la palabra”. Sin embargo, hace unos días y en ese mismo espacio, la posible candidata a la presidencia de la Junta de Extremadura, ha pronunciado unas declaraciones que contradicen, de manera absoluta, el valor de ese concepto. Si, como indicaba, unos instantes antes, su líder nacional, el Sr. Feijoó, nos encontramos en unos momentos en los que la palabra de los políticos no vale nada, viendo los hechos posteriores no podemos averiguar si sube o si baja. Pierden, no sólo la credibilidad actual sino que cada vez, que María Guardiola haga cualquier propuesta ha dejado sembrado el camino de la duda. Siempre habrá una excusa para justificar que donde dije “digo” ahora digo “ diego”. Lo intenta justificar señalando que antepone el presunto interés de los extremeños. Pero a nadie, y ha quedado en evidencia, a nadie se le oculta que sus compañeros de viaje, la extrema derecha, ha conseguido domesticar a los que han venido llamando la “ derechita cobarde”. Una vez que ha pasado de “pantalla”, pasa también de la indignación a la cuchipandi. Del jamás los dejaré entrar en mi gobierno a ser un partido cuyos principios compartimos. Va costando enseñar dientes, que se vislumbren las sonrisas compartidas. Pero todo llegará. Por el interés de los extremeños. Si bien nos deja perplejos, una y otra vez. Por ejemplo, ante una pregunta de los periodistas esta semana, Guardiola insistía en que seguía pensando lo mismo que dijo en su comparecencia el día de la constitución de la Asamblea: “ mis principios son los mismos”. ¿ En qué lugar quedan tanto VOX como el PP? Mientras, su compañero Juanma Moreno Bonilla le recordaba a principios de esta semana una realidad, como axioma político, “ se ha tragado sus palabras”. El cuento de la dignidad, la acusación del trazo grueso, queda como ejemplo de lo que no podrá enseñar a sus hijos. Uno de los personajes de la novela “Nunca” de Ken Follet decía lo siguiente:” la mayoría de los votantes sólo entienden los mensajes que se pueden estampar en una camiseta”. Esta parece ser la lección que hemos aprendido de la lideresa del Partido Popular en Extremadura. No profundicemos, si al fin y al cabo, las palabras dichas con contundencia sirven para trasladarse a los que quieran escucharlas, a los que quieran creerlas, simplemente en momentos muy puntuales y en procesos que sin pudor puedan cambiarse. A la espera de que nos olvidemos de este asunto, va a resultar que el cambio que según ella pedían los extremeños era el de su opinión en un momento concreto. ¿ Cuál será el próximo?

domingo, 2 de julio de 2023

REPROCHES

¡Qué fácil resulta cuando han pasado los acontecimientos realizar críticas y/o reproches hacia lo que pudo haber sido y no fue! Y mira que a la hora de emprender juicios de valor sobre un hecho, una decisión o un suceso, la crítica no tiene por qué ser necesariamente negativa o destructiva. Es más, la gente que tiene responsabilidades debería ser lo suficientemente inteligente para asumir una crítica constructiva ya que, con toda seguridad, le va a hacer crecer y hará posible rectificar o corregir el rumbo en momentos inmediatamente posteriores. Cierto es, que nadie tiene la certeza del dominio absoluto sobre determinados lugares del espectro electoral de manera cerrada. Cierto es, que todo fluye. Que hay intercambios de votantes de unos partidos a otros o de unas zonas a otras. Que el ansiado centro es el objetivo de los que buscan las mayorías. Pero no lo es menos, que el que es de derechas, es conservador y el que es de izquierdas es progresista. Y, en términos generales y ante posturas definitivas en un momento dado, como es el depósito del sufragio, el votante tiende a emitirlo en la dirección con la que se identifica en mayor medida. Como decimos el lenguaje coloquial, “ prefiere el original a la copia”. Por eso es importante dejar claro lo que nos ha enseñado la experiencia de años anteriores. Un ejemplo: en la legislatura del 2011 al 2015 el modelo de la derecha hizo que se cerraran muchos Puntos de Atención Continuada, que se suprimieran líneas de transporte escolar gratuito, que se redujeran becas o que parte del alumnado tuviera que estudiar con fotocopias ya que no se podían pagar los libros de texto. En estos mismos temas, podemos ver lo que se ha avanzado en los últimos años y aseverar lo que pueden perder los extremeños con un gobierno de las derechas. Por no hablar de cuestiones de tanta actualidad mediática como son la igualdad o la integración de la población migrante. No resultan creíbles las palabras de la candidata que se postula a presidir la Junta de Extremadura sobre la comprensión de estos fenómenos. Precisamente acaba de pactar un gobierno con la extrema derecha en Navalmoral de la Mata y Talayuela. Dos de las poblaciones extremeñas con mayor número ( y necesidades) de estos colectivos. En contrapartida, y como cantaba Rosendo, que lo sepa la ciudadanía extremeña en relación a Guillermo Fernández Vara: “no sé si estoy en lo cierto. Lo cierto es que estoy aquí”.