lunes, 27 de enero de 2014

¿ DÍAS AZULES?


¿ DÍAS AZULES?
Escuchaba recientemente en un programa de radio a una periodista analizar el discurso de Mariano Rajoy ante Obama cuando aludía a que se avecinaban muchos días azules. Metáfora poco apropiada para los millones de españoles que lejos de ver una tímida salida a sus desgracias viven envueltos en una sucesión de consecutivas borrascas.
Y no es que lo digan algunos analistas: son los Informes económicos europeos que una y otra vez nos recuerdan que en nuestro país se siguen acrecentando las diferencias sociales. Y algo tendrá que ver el Gobierno. Y no sólo será cosa de la crisis pues, en ese caso, todos nos veríamos afectados con la misma magnitud.
Sin embargo esa clase media, que tanto costó consolidar en España y que ahora se ve totalmente empobrecida es la que, lejos de la estadística, nos vomita de viva voz los avatares por los que discurre.
Pues es muy fácil ampararse en la retórica de la recuperación, utilizando cifras y letras y escondiendo a las personas. ¡Qué pregunten a la calle! ¡Qué reclamen a los cada vez más numerosos ciudadanos anónimos que desconfían de las instituciones y que en medio de un desamparo absoluto ni siquiera acuden a las llamadas de los Servicios Estatales y Autonómicos de Empleo!.
Esa revolución silenciosa en los medios que está presta a la algarabía interna de momento entre lo próximo. Que protesta y se queja ante sus vecinos. Que todavía no se organiza suficientemente. Pero que mostrará sus espasmos ante la mínima provocación. Como hemos visto en los últimos días.
Ante eso la izquierda tiene que estar preparada. De momento, el principal partido de la oposición, el PSOE está recuperando la iniciativa. Este fin de semana todos los focos mediáticos han estado puestos en lo que se debatía en su Comité Federal.
Ya conocemos el calendario de las ansiadas primarias. Nos esperan unos meses apasionantes: campaña electoral en primavera para las elecciones europeas, tras el verano conoceremos candidatos autonómicos y locales y en noviembre por primera vez, abiertos a la ciudadanía, se podrá participar para decidir quién es el candidato que pueda acabar con las borrascas de las que hablábamos al comienzo del artículo.
No es menos cierto que todo ha ido muy rápido, sin embargo algunos líderes han manifestado que aún tienen tiempo para pensar. Y planificar. Y actuar.
De nuevo el referente, el cambio que ilusionó a millones de españoles al comienzo de los 80 se presenta ante nosotros
Días de rojo pasión. Sin duda.



lunes, 20 de enero de 2014

MANOS LIMPIAS

http://www.elperiodicoextremadura.com/noticias/opinion/manos-limpias_781290.html
Esta semana hemos asistido a una nueva llamada de atención por parte del PSOE regional a aglutinar el denominado frente progresista que, como cualquier persona medianamente inteligente sabe, es una amplia mayoría en nuestra Comunidad.
Se trata, a mi juicio, de hacer ver a la ciudadanía que si es cierto que se han cometido errores en otros tiempos, es hora de rectificar. Hay muchas cosas que nos unen a partidos políticos de izquierdas, asociaciones, sindicatos, movimientos vecinales... gente en definitiva que tiene un ideario común: la apuesta por los servicios públicos y por el bienestar común ampliable a las máximas capas sociales y con la necesidad y urgencia de reducir desequilibrios.
Todo ello no es óbice, con la intención sana de cambiar y desde el aprecio, casi cariño, que tengo a algunos dirigentes de IU de demostrarles que no tienen las manos límpias. Que son copartícipes del desarstre al que lleva abocado en los últimos años Extremadura. Que mires por donde mires sólo se ve miseria, paro, desolación.... ausencia de motivación, sin duda.
Sólo se podrá avanzar desde el reconocimiento de que no tiene la culpa de todo lo que nos está pasando en exclusiva la derecha. Si los gobiernos socialistas pusieron los mimbres para que aumentara la desconfianza y con ello se vio abocado el PSOE a estar en la oposición, ahora, pasada la mitad de la legislatura y cuando no podemos estar recurriendo permenentemente al manido asunto de la herencia ( ese es otro tema a tratar, ya que hay muchas herencias y  no todas malas) es parte de IU la que debe hacer propósito de enmienda, pues algo tienen que ver en el balance tremendamente negativo de todo lo que nos rodea.
Pero lo más importante y visto desde la imperiosa mirada hacia dentro de nuestros ideales es que, partiendo del reconocimiento de que todos nos equivocamos, se aprecian síntomas de recitificación. De arrepentimiento si cabe. De demostrar que, como sucede en otros lares, sí se puede. Somos fiables.
La presencia, cada día mayor de buena parte de la izquierda en la calle, el encuentro en el escenario del debate, la creencia de que es bueno discrepar pero es muy importante coincidir en que podemos y tenemos que dar un giro a este nefasto rumbo, va a pesar más que los desencuentros que se han ido lastrando en los últimos años.
Gestos como el caminar unidos con el Campamento Dignidad, la renuncia al aforamiento en aras de una mayor transparencia en la gestión pública y en la demostración de que no todos somos iguales, el permanente recuerdo de nuestras raíces... hacen que día tras día nuestros paisanos nos empujen a pensar en la cuenta atrás.
Esa tristeza palpable, esa falta de ilusión, debe tener fecha de caducidad.

Manos limpias ( El Periódico Extremadura - 18/01/2014 )

lunes, 13 de enero de 2014

CONVENCER CON EL EJEMPLO

CONVENCER  CON EL EJEMPLO
Se habla mucho, últimamente, de la pérdida de credibilidad, tanto de personas como de instituciones, así como de la necesidad de recuperar el contacto directo con los problemas de la gente para generar empatías.
Creo que en la mayoría de las ocasiones este déficit viene generado porque no somos  capaces de combinar la necesidad de emprender grandes transformaciones (por ejemplo un cambio en la Constitución, en el modelo productivo, en las cifras macroeconómicas....), con las pequeñas cuestiones cotidianas que son las que más afectan y preocupan a los ciudadanos: las causas del cierre de su negocio, las bajadas de los sueldos, el paro imparable, la inexistencia de un futuro mínimamente digno para sus hijos....
A todo ello contribuyen declaraciones fatuas como las de Floriano cuando aseguraba que pondría la mano en el fuego por la honorabilidad de algunos de sus entrañables compañeros (cuando día sí y día también se cuestionaban) o Monago asegurando que se cortaría un dedo antes de tocar la Sanidad extremeña (y que yo sepa sigue luciendo todos y cada uno de sus pulgares, en muchas ocasiones con engreimiento notorio). Claro que argumentarán que son metáforas propias del discurso político y, por lo tanto, disculpables. ¡Pues que nos lo adviertan cuando las pronuncien para hacernos a la idea de que son meramente cuentos!
Finalmente todo se reduce a tratar de vencer en cualquier tipo de contienda. Hace unos días el Presidente de la Junta de Extremadura le recriminaba a su homólogo valenciano si tenía celos por ser menos popular que él. Pero para vencer hay que convencer. Que se lo digan a los funcionarios de Hacienda a los que argumentando su pasado socialista han presionado para que dimitan de las responsabilidades que ocupaban (dado que no los pueden echar a la calle). Cuántas barbaridades se evitarían si fuésemos conscientes de que un servidor público prioriza en esencia el contenido de la labor para la que está cualificado ante cualquier otro tipo de contingencia externa. Simplemente por la mera razón de que tiene el trabajo asegurado. Deberían por tanto ampararse en la independencia y el buen hacer de los empleados públicos en lugar de generar, una y otra vez, desconfianza hacia lo que representan.
El último caso de dejación de funciones lo hemos visto en la imputación de la Infanta. Si bien es comprensible que un padre vele y se desviva por sus hijos y los defienda a toda costa, lo es menos que el Presidente del Gobierno no haya impulsado que la Jefatura del Estado, institución de la que casi la única obligación que se le pide es la ejemplaridad, contribuya para que ésta no se deteriore. Para ello debería haber hecho lo posible para que a estas alturas la infanta hubiese abandonado las tareas de representatividad que la corresponde o haber insistido en que era preciso que voluntariamente testificase para aclarar (si puede) todo lo que, con cuenta gotas, va saliendo a la luz pública. Y es que, aunque algunos les cueste entenderlo: son humanos. Y se pueden equivocar. Eso de primus inter pares  son cosas de otros tiempos.Convencer con el ejemplo ( El Periódico Extremadura - 11/01/2014 )http://www.elperiodicoextremadura.com/noticias/opinion/convencer-ejemplo_779858.html

martes, 7 de enero de 2014

PARALELISMOS


En una charla con unos compañeros pergueñamos unos apuntes que demostraran que, además de para poner en valor unos principios, la Historia era útil. Del mismo modo abundamos en el desconocimiento de nuestra realidad más cercana y en cómo debería ser preciso incrementar el número de cursos o sesiones de formación para divulgarla y que la gente pueda pronunciarse con propiedad. Más que nunca ahora donde, amparándonos en la libertad de expresión y opinión se vierten comentarios en las redes sociales sin el más mínimo rigor científico y de los que, pese a las argumentaciones objetivas no somos capaces de salir, en numerosas ocasiones,de la descalificación perenne.
Por esa razón me gusta establecer paralelismos entre situaciones vividas hace años con el entorno más próximo. Pongamos algunos ejemplos:  hace unos días el debate se aceleraba de forma inusitada alrededor de la increíble subida de la factura de la luz, “ el tarifazo”. El sobresalto era  mayúsculo pues comprobábamos que  una situación de enorme crisis económica iba a contribuir aún más a acentuar el desequilibrio de las economías domésticas mas modestas. Es lo que hemos dado en denominar “ pobreza energética” y que está posibilitando que miles de hogares pasen, literalmente, frío. Antes, sucedía algo similar: con casos como una simple subida de los productos básicos, como el pan, un estado de desempleo sin coberturas sociales o las meras condiciones meteorológicas ( recordemos sitios como en Extremadura con una dependencia absoluta del campo, donde el día que no se trabajaba, no se comía y por lo tanto, si por ejemplo, llovía, te condenaban ese día a quedarte sin jornal). Pues bien, estas economías, entonces prácticamente de subsistencia ( y ahora, en ocasiones, encaminadas a ellas) sufrían de manera extraordinaria estos embates ocasionales.
Otra muestra de lo que venimos diciendo es el papel de nuestros mayores. Hoy en día, los pensionistas, aunque dentro de unos años pueda parecer surrealista ( o si alguien viajara en el tiempo desde atrás, pensaría lo mismo) colaboran en el mantenimiento del nivel de vida de sus hijos  y nietos. Antes, sin embargo, eran los propios padres los que tenían que sacar a sus hijos de la escuela para ponerlos a trabajar y contribuir con sus pequeños salarios a unos ingresos familiares muy deteriorados.
Finalmente estos días estamos asistiendo a la solidaridad de papel de los mensajes ocurrentes del Jefe del Estado desde Zarzuela o los de la Moncloa del Presidente del Gobierno ( con su acólito en la Plaza del Rastro de Mérida). Antes la solidaridad se alejaba de los discursos para hacerse realidad por medio de “ cajas de resistencia” o de los llamados “ socorros mutuos” que organizaban los trabajadores para atender las necesidades más perentorias de sus semejantes. Bueno, antes y ahora: lo último lo vivimos en Baleares donde una huelga de profesores se pudo mantener en el tiempo, gracias precisamente a la puesta en práctica de este método de sus predecesores. Ah, la utilidad de la Historia.
Paralelismos ( El Periódico Extremadura - 04/01/2014 )http://www.elperiodicoextremadura.com/noticias/opinion/paralelismos_778566.html