martes, 31 de julio de 2018

HONORABILIDAD


Esta semana en la Asamblea hemos aprobado una Propuesta de Pronunciamiento para reconocer la honorabilidad de los principios que inspiraron a los masones. Ha salido adelante con el voto a favor del PSOE y de Podemos. En contra ha votado la derecha ( es decir, el PP). Alguien comentó, no sabría precisar, si con ironía o con ignorancia, que era un tema que preocupaba mucho a los extremeños. Quizás, en el impulso verbal o escrito que hace que, a veces, se trasladen opiniones más rápidas que las que el cerebro puede procesar, no se haya parado a reflexionar que gracias a los valores que defendieron los masones, se han producido buena parte de las conquistas sociales de las que hoy disfrutamos o, al menos, podemos libremente reivindicar.
Conceptos como democracia, consenso, entendimiento, diálogo, libertad, tolerancia, respeto… son la base de la lucha que mantuvieron los masones a lo largo de la Historia en su búsqueda del progreso universal.
Por todas estas razones fueron perseguidos, reprimidos, en España obligados a un cruel exilio al finalizar la guerra civil y ahora, lo que se perseguía, era únicamente poner en conocimiento de la opinión pública la gran injusticia que padecieron, al igual que la que se realizó con miles de nuestros compatriotas, por el simple hecho de apostar por la Democracia en lugar de por la Dictadura.
A ello se le une el intento de desmitificar tópicos y mitos en torno a la figura de lo que significó ser masón. Es posible que en los próximos meses con la entrada en el debate parlamentario de la futura Ley de Memoria Histórica de Extremadura podamos avanzar en la consecución de estos objetivos.
Así podrán repararse todos aquellos agravios que han permanecido en el silencio. Así podrán revitalizarse los procesos de exhumación de los restos, todavía, esparcidos en las cunetas de caminos y carreteras de nuestra región. Así, en definitiva, podrá investigarse, difundirse, dar luz, a las partes más oscuras de nuestra, aún, muy desconocida intrahistoria reciente.

Todo ello no es incompatible con la persecución de soluciones a los grandes problemas cotidianos. Eso sí, debemos reconocer que, gracias a la permanente inquietud de nuestros predecesores, hoy podemos estar peleando libremente por aportar lo que cada uno puede, sin más imposiciones que la fuerza de los votos y sin más ruidos que las voces de la ciudadanía.

martes, 24 de julio de 2018

HISTORIAS LOCALES


Me encuentro en estos momentos leyendo un libro de Historia de los que se podrían denominar “estudios locales”. Son trabajos de investigación, habitualmente muy elaborados, documentados, minuciosamente escudriñados…, que analizan, hasta el mínimo detalle,  la singladura espacio-temporal de una población.
Es evidente que el atractivo mayor lo despiertan para los vecinos de ese pueblo, pero no lo es menos, que pueden resultar de sumo interés para aquellos que quieran acercarse a un contexto mucho más global.
Da la casualidad que cuando son obras con fuentes muy variadas y con acierto en su selección, nos encontramos con multitud de coincidencias de contexto. Por lo tanto, sirven para corroborar tesis más generales o para conocer y/o ratificar otras historias mucho más amplias.
Esta semana también hemos hablado en la Asamblea de las comunidades extremeñas en el exterior. No es baladí que tratemos aquí de significar que tenemos miles de extremeños viviendo fuera de Extremadura. Unos por radical necesidad, otros porque han encontrado una mejor forma de realizarse vitalmente y otros porque se están formando.
Una característica común a todos estos grupos es la necesidad de establecer vínculos con sus raíces. He tenido la oportunidad de poder hablar con algunos (también con sus padres o familiares) y siempre el vínculo emocional con su tierra hacía posible un ofrecimiento de colaboración para intentar mejorar las condiciones de vida que nos rodean.
De esta manera, tanto las historias locales con las que comenzamos el artículo, como los extremeños fuera de nuestras fronteras, se unen en el impulso del conocimiento de una realidad muy próxima y, por lo tanto, muy querida. Tanto con un instrumento, como con otros, seguimos construyendo región. Tanto con los libros como con las personas, estamos haciendo posible la identificación de un sentimiento regional mucho más amplio y asumido.
El poder del conocimiento junto a la fuerza de las personas. Cualificación precisa.


martes, 17 de julio de 2018

PARALELISMOS


Un  buen amigo mío se ha acordado de un familiar que estuvo en el campo de concentración nazi de Dachau. Al mismo tiempo yo visualizaba un documental sobre las peripecias de miles de españoles que, al final de la guerra civil, tuvieron que salir precipitadamente al exilio.
Son las otras “Memorias” menos reivindicadas cuando hacemos alusión a la Memoria Histórica o a la Memoria Democrática. Miles de compatriotas que tuvieron, literalmente que huir, muchos sin destino conocido  a la búsqueda de una nueva vida, cuyos comienzos eran totalmente desalentadores.
Y aquí es donde entran en juego los paralelismos con la situación actual. Si uno lee  o ve, como ha sido mi caso, imágenes de barcos repletos de gente, inmigrantes sin permisos oficiales para desembarcar, hacinados en las bodegas, apiñados en las cubiertas, sin apenas equipaje…. no puede dejar de pensar en barcos como el Aquarius, o en las innumerables barcazas que, desde hace tiempo, surcan el Mediterráneo queriendo llegar a la, para ellos, añorada Europa.
Y sin embargo, se trata de documentos gráficos de hace casi 80 años. Reproducen las mismas escenas que hoy vemos. Nos retrotraen a situaciones de extrema solidaridad, junto a otras, mucho menos indulgentes. Vemos, también, como en muchas ocasiones, los españoles que detestaban la Dictadura, que se marcharon exclusivamente para poder salvar sus vidas, reciben como respuesta una acogida en determinados escenarios, totalmente desoladora.
Asistimos, entonces, atónitos a discursos en los parlamentos de diputados de la derecha que tratan de expulsarles de su territorio, que les tratan como alimañas, que les arrebatan todos sus derechos y que entienden que, ni pueden, ni deben acogerles. Casi como hace unos días.
¡Cuántas veces hemos señalado que la Historia es la maestra de la vida!. Ahora volvemos a recordarlo. Así,  cuando aparezcan ante nuestros ojos miles de inmigrantes que quieren buscar un futuro mejor, acordémonos de que muy bien podrían haber sido nuestros abuelos. Aquellos entrañables paisanos que durante sus vidas lucharon por hacer de sus pueblos un lugar bonito para vivir y que recibieron como recompensa una expulsión no deseada y,  a veces, una acogida poco grata en sus nuevos destinos.
Paralelismos.


martes, 10 de julio de 2018

ESTABILIDAD


En el pasado Debate sobre el Estado de la Región una de las palabras más escuchadas, en boca del Presidente de la Junta de Extremadura, ha sido “estabilidad”.
En efecto, se trata de un concepto que en tiempos de mudanzas, de enfrentamientos, de animosidad constante…, genera atracción desde el polo que podríamos denominar positivo de las personas.
El crecimiento, la paz social, van unidos al deseo constante de no retroceder. De mirar atrás para reconocernos. De confiar en las enseñanzas de la Historia de Extremadura sin necesidad de ruptura. No seremos nacionalistas, pero amamos nuestra tierra, nuestras gentes, nuestras raíces, lo que hemos conseguidos tras siglos de luchas y lo que no queremos que se vuelva a repetir.
Ahora estamos en el momento de repensar. Sí, otro concepto muy manido, pero muy útil, para definir que, en ocasiones, es necesario reflexionar, para coger impulso y planificar qué queremos que sean nuestros nuevos modelos de desarrollo.
En ese sentido, muy ilustrativo fueron las aportaciones realizadas en torno a la llamada a una participación colectiva, activa e inteligente. A una huida de los hiperliderazgos, sustituidas por la colaboración y el máximo consenso. A la formación de equipos. Al rescate de la imagen de la Universidad de Extremadura. Una institución que debe ser una máquina generadora de ideas y de cualificación de nuestros mejores elementos productivos, de riqueza y bienestar. La tenemos, entre todos, que reforzar. Repensemos.
Y todo ello se debe necesariamente moldear desde la Asamblea, con un ambicioso paquete legislativo que tomará forma en los próximos meses. Gracias, entre otras muchas más cosas, al empeño de la sociedad civil que ha contribuido en los últimos meses a aportar sus inquietudes, sus conocimientos, sus propuestas,  a los borradores de cada uno de los proyectos.
Sin embargo, nos cuesta tener paciencia. No somos capaces de ser conscientes de que nadie nos ha regalado nada. Que si avanzamos tiene mucho más mérito aquí que en otros sitios que parten de situaciones enormemente más privilegiadas.

Así pues, sigamos, con el ruido que haga falta, pero sin distraernos ni perder energías en batallas fraternales. Tenemos ante nosotros grandes retos. Seguimos dando pasos. Empujemos.

martes, 3 de julio de 2018

PRISAS


No lleva ni un mes el nuevo Gobierno asumiendo tareas de responsabilidad, y ni siquiera, ha tenido una tregua, como diría la vicepresidenta, “no de 100 días, si no de 100 horas”.
Es cierto que, al margen de la corrupción, causa principal y/o detonante del cambio, la derecha ha dejado como herencia un país totalmente descosido. Ante este reto, numerosas iniciativas se han puesto en marcha y en la calle se  respira y se camina de otra manera.
Se han generado muchas y variadas expectativas que tan solo el paso del tiempo nos va a decir si son posibles llevarlas a cabo. Las dificultades no son menores, pero, no cabe la menor duda, que la formación académica y profesional de los actuales ministerios lleva consigo una gran diferencia con otras épocas.
En muchas ocasiones, el etnocentrismo domina las actuaciones. Se sienten el centro del Universo, y no es baladí el pronunciamiento de la gente cuando, una y otra vez, repiten que una característica dominante de “los que mandan”, es permitir que nadie les haga sombra.
Por eso, con el nombramiento de estos altos cargos cabe preguntarse, ¿ por qué no se ha hecho antes con más asiduidad?
Una vez definido el organigrama, detectada una primera hoja de ruta, planificadas las primeras actuaciones, nos chocamos, como por otra parte era previsible, con la oposición de aquellos que fueron desalojados del Poder. Quizás, intervenga en este sentido un factor de patrimonialización que suele tener la derecha, cuestionando incluso los valores democráticos, al verse en  la necesidad de pasar a la oposición.
Quizás lo que suceda es que no son conscientes del enorme agujero que han creado en la credibilidad de las instituciones, y prefieran seguir horadándolas o permitir que la ciudadanía siga alejada de sus servidores públicos.
Pero de momento contamos con nuevos aires y  por eso, y tal como cantaba Melendi, tendremos que convenir, ante los llantos del PP, “¿No crees que ya es muy tarde para tener prisa?