EL OPORTUNISMO DE LA MODERACIÓN

Charlaba hace unos días con un exdirigente de IU sobre la postura que iba a abordar, de nuevo, su coalición en el debate de los presupuestos de Extremadura. Intercambiábamos opiniones tratando yo de hacerle un paralelismo con la actitud que tomaban las fuerzas de izquierdas en otras Comunidades e incluso los posicionamientos sobre temas nacionales. Es decir hablábamos de coherencia. Hablábamos en definitiva de cómo se estaba, por activa y por pasiva dejando gobernar a la derecha en Extremadura. Tema recurrente, sin duda. En estas estábamos cuando saltó como un resorte para indicarme que no se puede generalizar. Que son muchos los militantes de base que no comparten la postura de algunos de sus dirigentes. Que eso no era Izquierda Unida. Y sobre todo, apelábamos a la Historia. Una historia de muchos desencuentros, sin duda, pero sobre todo de muchos, muchísimos elementos comunes. La cercanía ideológica hacía que pareciese poco más que un insulto que se acuse a IU de connivencia con la derecha. Sin embargo por mucha camiseta verde que se ponga su líder principal, por mucho discurso y ademanes teatrales que realice en la Asamblea cuando se les recriminen esos posicionamientos, resulta obvio, como también comentaba otro destacado miembro de IU en Badajoz, “parece que ahora nos hemos hecho moderados” en alusión a que el que da la cara en su formación justifica sus planteamientos en la necesidad de huir de los radicalismos. Más les valía, dado que según insisten están consiguiendo un giro a la izquierda del gobierno regional, que les exijan una adaptación de la LOMCE como hacen sus compañeros de Andalucía. O que se siga impartiendo Educación Para la Ciudadanía, si de verdad creen en su necesidad. Por poner sólo dos ejemplos muy sencillos. Otro de sus argumentos en el debate presupuestario es que los socialistas no presentan más que propuestas de gastos, pero hace falta buscar de donde sacar los ingresos ya que todo viene prácticamente hecho de fuera. Cabe preguntarse ante esa tesitura, entonces ¿qué pintan ellos allí? Para eso dejamos algunos funcionarios cualificados que cuadren las cuentas y que establezcan rutinas de pagos. Si se quiere se puede. A no ser que sigan la consigna de Mariano Rajoy: “parece que llueve” o lo que es lo mismo una interpretación muy ajustada de lo que se ha dado en denominar, la mayoría silenciosa. Es decir, cuando millones de españoles salen a las calles a protestar por la situación de la sanidad, de la educación, de los cierres de empresas... la respuesta va a ser que la privatización y/o el desmantelamiento de los sectores públicos están amparados en esperar a que escampe. Ya se cansarán de protestar, auguran. El oportunismo de la moderación ( El Periódico Extremadura - 02/11/2013 )