lunes, 28 de octubre de 2013

REMONTAR

Como la lluvia fina que va calando a ritmo pausado pero constante escuchas en la calle, lees en los medios de comunicación o ves en las redes sociales que la situación se torna cada vez más calamitosa. Y todos parecen coincidir en que la derecha nos hunde. Y todos los que se acercan a comentarte sus problemas parecen arrepentirse de haberles votado. Y todos proclaman con nostalgia que se inicia la cuenta atrás. Eso sí, en el otro extremo se sigue con la matraca de la herencia, del pagar la “barra libre”... vamos para tres años y todavía siguen pensando que la inacción (en el mejor de los casos), cuando no la contrarreforma, se puede amparar en el pasado. Sin embargo la razón te indica que los socialistas tendremos que hacer mejor las cosas. Es evidente que el Partido Popular ha perdido buena parte del crédito que obtuvo gracias al aparente desconcierto de la última fase de la segunda legislatura de Zapatero. Pero por otra parte, insisto, algo estaremos haciendo mal cuando, encuesta tras encuesta, no conseguimos remontar la previsión de voto. Y ya sé que la única válida es la urna. Y ya sabemos que todo va muy rápido y lo que ahora parece que no, luego puede ser que sí. Y también somos conscientes que a veces todo se mueve en horquillas muy estrechas. Pero por primera vez en mucho tiempo, los dos grandes partidos han visto muy deterioradas las perspectivas de su electorado. Ambos tienen un suelo muy alto, sin embargo, no es menos cierto que la aparición en la aritmética parlamentaria de fuerzas, antes minoritaria, ahora en ascenso, quiebra la posibilidad de mayorías absolutas o de grandes diferencias entre ellos. Esto, que para algunos puede ser positivo: da mayor riqueza al espectro, pluralidad, diversidad de opiniones y de posicionamientos... para otros nos conduce algo alejado a nuestra cultura de escasez de pactos. Pongamos ejemplos de nuestro entorno en Europa: estos días estamos asistiendo a cómo se produce la entrada en el Gobierno de miembros del SPD (los socialistas alemanes), algo totalmente impensable en nuestros lares. Otro ejemplo es el caso italiano con un Parlamento atomizado y continuamente inestable y en tensión. Nosotros nos parecemos más a modelos como el francés o el británico con dos o tres partidos hegemónicos y donde al margen de las grandes diferencias ideológicas se turnan o consolidan varias legislaturas en el Poder. En España y por ende en Extremadura se habla últimamente de formar frentes para evitar que la derecha obtenga la mayoría absoluta, (siempre con el beneplácito de los votantes), pero deberíamos si vamos por esta línea hacer un enorme esfuerzo por ejercer pedagogía del encuentro entre lo diverso. Para los socialistas, se busca como un bálsamo el efecto de los titulares de la próxima Conferencia Política. Haríamos mucho mejor en buscar esa concreción día a día, ya que los problemas no se resuelven en un fin de semana. Remontar ( El Periódico Extremadura - 26/10/2013 )

lunes, 21 de octubre de 2013

EXTREMADOC, OTRA FORMA DE HACER EXTREMADURA

Un año más un grupo de entusiastas liderados por Alberto Durán sacan adelante el Festival Internacional de Cine Documental y de Cooperación Extremadoc. Para aquellos que disfrutan de sus actividades es bueno recordarles que a lo largo de los meses previos se desarrolla una ingente actividad plena de voluntariado, donde tienen un papel activo desde los principales responsables, hasta el Jurado, los chicos y chicas jóvenes que componen el equipo, los otros miembros que ya han consolidado sus tareas y que se siguen sumando, hasta las instituciones que tienen que ser receptoras de nuestras, a veces incómodas demandas. El Instituto Camoens, la Universidad de Extremadura, las Escuelas de Idiomas, ONGs como UNICEF, la Diputación o la Consejería de Educación y Cultura contribuyen a que no sólo podamos aprender reviviendo experiencias de otras latitudes, sino que el hecho de que más de 2000 escolares se impliquen en los talleres, o que distintas Asociaciones distribuidas por toda la región quieran contribuir a hacer un proyecto colectivo, o que la enseñanza en otras lenguas pueda convivir con el aprendizaje de valores nos pone cada vez más satisfactorio el listón sobrepasado. A todo ello se le suma la calidad de los trabajos que nos llegan. Seguimos pensando que es un sacrificio para los creadores que tengamos que seleccionar el número de películas a exhibir, pero no por ello se desmerece la posibilidad que, hoy con nuevos retos como el visionado a través de enlaces de internet, podamos contribuir a expandir. Además queremos seguir profundizando en nuevas líneas de trabajo que puedan unir el entorno del documental, la cooperación al desarrollo, la educación en valores, la formación para el empleo, la utilización de los espacios públicos... En esta edición que se comenzó con una preciosa exposición que se puede visitar en el Carpe Diem de Cáceres, obra de los fotógrafos de El Periódico Extremadura, Francis Villegas, y de Sergio Lorenzo del diario Hoy, se han preparado multitud de proyecciones con algunas novedades en su distribución temática y por lo que a mi me respecta, con una agradable acogida: se trata de las relacionadas con la Historia más reciente. Para ello aconsejo que si pueden vean ( los que no hayan podido acudir el pasado miércoles a la Biblioteca Pública de Cáceres) “La maleta mejicana” o “Las maestras de la República que se estará proyectando en Cáceres, Mérida y Plasencia con la colaboración de Asociaciones como GEHCEX, AdeFEx , Óculo Audiovisual o FETE. En definitiva, una oportunidad para seguir creciendo y construyendo en Extremadura. Extremadoc ( El Periódico Extremadura - 19/10/2013 )

lunes, 14 de octubre de 2013

RECUPERANDO LA DESIGUALDAD

Durante las próximas semanas nos van a agobiar con el relato de lo que en términos coloquiales se ha llamado la “política hecha números”. Primero serán debatidos los proyectos de presupuestos nacionales, para pasar luego a los autonómicos y locales. El concepto que revierte en el imaginario popular, con la cosa de que hay que ser optimistas y creérnoslo, por si acaso, es que son los presupuestos de la recuperación económica. Voy a seguir reivindicando que se puede hacer otra política económica a fuerza de ser agorero y de saber de antemano que, al igual que sucede en la escenificación del teatro político, saldrán muchos personajes a comentar el manido tema de la herencia Y tienen razón: la situación actual puede, si se quiere, compararse con la herencia de gobiernos socialistas anteriores. Eran los años en los que muchos de los derechos de los que ahora nos quejamos, ya sea por su estancamiento, ya sea por sus recortes, fueron disfrutados por la inmensa mayoría de los españoles. A nadie, en su sano juicio se le escapa, que fueron los gobiernos socialistas los que lograron la época de mayor prosperidad y avance de la Historia reciente de España. Fueron los años de la consolidación del Estado del Bienestar ( ahora incluso cuestionado). Fueron lo años de la educación y sanidad pública universal y gratuita ( ahora copagos, eliminación de transporte escolar, subidas de tasas universitarias, dificultad para acceder a una beca, supresión de comedores.. son la tónica desgraciada habitual). Tampoco puedo ocultar que fueron años de muchos errores. Pero en eso consiste el progreso, en rectificar no en retroceder, como sucede en la actualidad. En tratar de aminorar las consecuencias de las dificultades para los más desfavorecidos, no acentuar su acción en ellos. En buscar equilibrios, no en fomentar desigualdades. Claro, la culpa siempre será del “otro”. Asistiremos en la tramitación de estos presupuestos a argumentarios que lejos de justificar no ya la inacción sino la ofensiva sobre la tragedia de miles de familias se esconderán detrás de la famosa pantalla de plasma del “yo no lo hubiera hecho de haber sabido que la cosa estaba tan malita...” Incluso se permiten la caricatura de sacar pecho con una presunta subida de las pensiones un 0.25 sin explicar la micropolítica: es decir la subida de los precios hace que la situación sea mucho peor que si de verdad contaran que la realidad demuestra que nuestros mayores van a perder un elevado poder adquisitivo (que antes no pasaba). Eso por no señalar que, una vez más se insulta a los funcionarios congelándoles el sueldo mientras algunos destacados militantes de la derecha insisten en que sobra la mitad, no trabajan lo suficiente, cobran todos una barbaridad.... Cuando yo gobierne bajará el paro, decía uno. Lo primero el empleo, replicaba el otro. Recuperando la desigualdad ( El Periódico Extremadura - 12/10/2013 )

lunes, 7 de octubre de 2013

EL PODER DE LA MEMORIA

De nuevo, voy a abordar un tema relacionado con aspectos que me apasionan: la Historia reciente, contemporánea o cómo nos enseñaron en la Universidad: la vinculada al tiempo presente. Independientemente de las simpatías que represente expresar determinadas opiniones, las cuales pueden ser rebatidas siempre con argumentos, si bien en numerosas ocasiones se prefiere distanciarse del debate, enrocarse y soltar la descalificación sistémica. Para ello quisiera valerme de algunos ejemplos que identifican lo que significa, a mi juicio, el poder de la memoria. Hace varias semanas unas obras de remodelación del Congreso de los Diputados sellaron en el techo las huellas de los disparos de los golpistas del 23-F. Ya sé que para muchos puede ser tan sólo una anécdota. Soy consciente de que para otros tantos se había convertido en parte del ritual de un recorrido semiturístico cuando se visitaba la Cámara Baja.. Sin embargo para muchos otros era el testigo que nos recordaba cómo la barbarie ha estado cerca de nosotros no hace tanto tiempo. Cómo la ansiada Democracia estuvo tambaleante casi ayer. Cómo los desaforados gritos de aquéllos que cuestionan la labor de los políticos pueden reproducirse gracias a que todo aquello se abortó. Y por eso me hubiera gustado una condena más unánime a ese desafortunado accidente. Otra muestra de nostalgia criticada con suavidad por determinados dirigentes es el alarde de algunos componentes de las nuevas generaciones de la derecha simulando su analogía fascista (con símbolos, ademanes....). En este caso a algunos nos dan a entender que se puede tener nostalgia por la herencia que el franquismo dejó. O bien que, aunque nos pese, existe un cuerpo social que lo defiende. O que para no atragantarnos quieren que sirva de simple excusa el alegato a la inmadurez de quienes así actúan. A lo mejor es que les cuesta reconocer de manera implícita su frontal desacuerdo. En definitiva, creo que la mayoría de los españoles tenemos algo en común: nuestro aprecio (en ocasiones no muy bien valorado) sobre lo que significa la Democracia frente a lo que supuso la Dictadura. Es verdad que es posible que necesitemos quizás hacer un especial esfuerzo de pedagogía entre los jóvenes. Algo a lo que parece no estar convencido el gobierno de la derecha cuando elimina (frente a lo que es habitual en el resto de Europa) la asignatura de Educación Para la Ciudadanía. Pero en fin, cierto es que hubo un momento en que muchos renunciaron a sus principios porque entendieron que lo prioritario para España, en un momento complicado como fueron los primeros años 80, eran resguardar ante todo la libertad y luchar por la igualdad. Tenía que llover como nos recordaba nuestro paisano. A cántaros. El poder de la memoria ( El Periódico Extremadura - 05/10/2013